Cuando el sentido común se apodera de las políticas públicas

Todos hemos pensado que los servidores públicos son los encargados de realizar las gestiones que los ciudadanos consideramos como necesarios o prioritarias, es por eso que resulta muy extraño que ciertas autoridades no sigan “naturalmente” las tendencias de las necesidades actuales, o que “requieran” de que se les diga las acciones que para los ciudadanos tienen importancia.

Pareciera, en este punto, que se requiere de una inteligencia superior para saber las necesidades urgentes y reales de la población, mientras que hay también, aquellas autoridades que parecieran atentas a las necesidades diarias de la población.

Y es que resulta increíble de entender que en pleno semáforo COVID, la autoridad correspondiente, con su venia o su complicidad, permita la celebración de eventos como gallos (espectáculo de por sí fuera de la “normalidad” en estos tiempos modernos), o fiestas, pero evitando el uso de los espacios públicos para disminuir la densidad por metro cuadrado y así hacer menor el riesgo de contagio.

No todo está perdido, desde hace muchos meses, algunas autoridades del Estado de Guanajuato, donde vivo y trabajo, han estado ayudando a los ciudadanos en sus necesidades diarias, y es que la base de la Protección Civil son tres, las empresas, el gobierno y los ciudadanos, y así podemos encontrar la labor encomiable y admirable de Protección Civil San Francisco del Rincón, que desde hace unos meses se ha dedicado, entre todas las demás labores, a conseguir oxígeno medicinal en la Ciudad de León, y trasladarlo a su municipio para brindarles apoyo a sus ciudadanos sin costo, aún a costa de las actividades familiares de su Director, Carlos.

En la semana se ha anunciado también por parte de Protección Civil de León el mismo apoyo, y ojalá así se hiciera en todos los Municipios del Estado y del País.

Si la Protección Civil se llevara como en ese Municipio, si los políticos que son llevados a gobernar por el pueblo tuvieran y mantuvieran la cercanía con la gente, si se dieran cuenta que a veces no se requiere una gran inteligencia sino menos soberbia y un poco de voluntad, tal vez esto pasaría de mejor manera.

Gracias Carlos, por dar el ejemplo a pesar de tantas dificultades personales y tanto tiempo de tu vida que no volverá…

Facebooktwitterredditpinterestlinkedintumblrmail

También te podría gustar...

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *